La artesanía antigua se une a la tecnología moderna: un informe de campo sobre nuestras máquinas XS

¿Cuál es su primera impresión?

Sarah Stahl: "Hasta ahora estoy muy contenta con las máquinas. Empezamos directamente con un material difícil (terciopelo de seda), que en realidad no se puede tocar, pero hay que hacerlo. Conclusión: ha funcionado bien. La aplicación muy fina de pegamento se mantiene incluso en el material voluminoso. Las cintas de tela con lomos rectos son casi fáciles de colgar. Meter libro en tapas manualmente no es necesariamente fácil cuando se aprende. Ahora el trabajo está hecho sin tener que ajustar nada. También he colgado algunas revistas con lomos redondos. Aquí o necesito todavía algo de práctica para que quede realmente perfecto. Podría haberlo hecho mejor manualmente, al menos en el primer intento. Pero eso no es malo. La práctica hace la perfección."

¿Qué ventajas aportan las nuevas máquinas?

Sarah Stahl: "Gracias a la aplicación de una cola muy fina, no necesitamos poner ningún cartón de separación entre las guardas y el bloque del libro durante el secado, porque entra menos humedad en el libro. Eso ahorra tiempo y material. Veremos si siempre funciona así. Con los 100 libros más o menos, eso estuvo bien. Pero hay que trabajar muy sincronizado y no hay que molestarse para que los libros no estén demasiado tiempo en el PräForm XS, porque si no los cortes se pegan demasiado. Así que la aplicación del pegamento es algo con lo que todavía tenemos que jugar. Pero, de nuevo, eso depende del material. También hay que aumentar un poco la distancia entre los pliegues, ya que así se pueden apretar mejor. También es estupendo que se pueda reducir la temperatura. No todos los materiales toleran el calor."

¿Qué grado de satisfacción tiene con nuestro servicio (asesoramiento, compra, etc.)?

Sarah Stahl: "Por supuesto, también nos pareció estupenda la presentación personal del Sr. Jörn Schmedt y del Sr. Gossen, que además nos solucionó un problema con nuestra máquina de encolado en el lateral. Eso da seguridad. En definitiva, esto es exactamente lo que aprecio de Schmedt: Tienes un contacto personal con los empleados/jefes y te reciben a la altura de los ojos, ¡ya sea que hagas 1.000 euros de ventas allí o mucho más! Hasta ahora, siempre me han ayudado cuando he tenido problemas, y las cosas no siempre van bien con nuestra encoladora, que es nuestra máquina más importante. Incluso cuando hemos tenido peticiones de pequeños cambios (ajuste de tornillos), se han tenido en cuenta nuestros deseos, ¡a menudo simplemente a cambio de la pieza anterior! Además, siempre realizan entregas rápidas y fiables, lo que, por supuesto, también es importante para nuestros clientes."

¿Qué le hizo decidirse a comprar las dos máquinas?

Sarah Stahl: "Por un lado, la serie XS de Schmedt es maravillosa en términos de espacio - como muchas otras pequeñas empresas, no tenemos mucho espacio y somos campeones del mundo de apilamiento - por otro lado, las máquinas son, por supuesto, muy interesantes en términos de precio! No podemos invertir fácilmente por varios 10.000 euros. Mi colega y yo tenemos que trabajar muy duro físicamente para ganarnos el pan y me he comprometido a facilitarnos las cosas si es posible, para poder seguir ahí dentro de 20 años (espero que sin muchas molestias físicas). Mi aprendiz quiere aprender el clásico meter libro en tapas, y lo hará, pero Nina y yo no tendremos que hacerlo. Así que en resumen: quería un alivio para nosotros. Además, con las máquinas calculo que a medio plazo también podré ofrecer tiradas algo mayores a un precio razonable."

¿Cuándo nació la encuadernación Mensch?

Sarah Stahl: "Me hice cargo de la encuadernación Mensch de Bruno Mensch en 2010. Antes de eso, trabajé allí durante dos años. El Sr. Mensch se hizo cargo de la encuadernación en 1993 de la Sra. Winz-Bücher, que a su vez se hizo cargo de sus padres. Calculamos que la encuadernación existe desde principios del siglo XX, pero no tenemos pruebas de ello. En 2012 me trasladé a una tienda con escaparate en la Südstadt de Colonia - en 2018, lamentablemente, tuve que volver a mudarme porque el antiguo propietario tenía ideas de alquiler interesantes. Ahora en Barbarossaplatz hemos llegado con suerte y nos sentimos muy cómodos."

¿Cuál es su enfoque?

Sarah Stahl: "En realidad, ofrecemos todo lo que puede hacer un encuadernador - excepto enmarcar cuadros. Intentamos responder de forma flexible e individualizada a los deseos de nuestros clientes y entregarlos a tiempo. Encuadernamos libros en materiales clásicos, pero no nos asustan los retos (por ejemplo, un libro que hemos cubierto con una lámina que se suele utilizar para cubrir un frigorífico). Realizamos relieves y perforaciones y hacemos cajas para el almacenamiento, la presentación o como embalaje decorativo. También hacemos carpetas y archivadores y reparamos viejos tesoros. Hacemos ediciones de 1, pero también ediciones de 500 o más - depende un poco de lo que se necesite. En algún momento nuestra capacidad tiene un límite. También hacemos productos parciales y terminamos un libro de fotos, por ejemplo."

¿Qué distingue a la encuadernación Mensch?

Sarah Stahl: "Para nosotros, lo principal son las personas y el producto. No importa si es el empleado o el cliente. Los clientes suelen entregar el corazón de su negocio en manos de otras personas y se supone que nosotros debemos salvarlo o volverlo a unir. Para ello, tenemos que transmitir franqueza y honestidad y, por supuesto, competencia profesional. Amamos nuestra profesión y se nos dice una y otra vez que eso se nota. Para mí es importante que elaboremos el mejor producto posible para nuestros clientes. Al menos, a partir de las posibilidades que se nos ofrecen. Eso no siempre es fácil y también hay que hacer concesiones, pero el intento siempre está ahí. Por eso la consulta es siempre una parte muy importante para nosotros. Por desgracia, también es la parte más ineficaz, porque no se paga y cuesta mucho tiempo. A veces me gustaría que los encuadernadores no fueran considerados artesanos, sino artesanos que han pasado un examen de oficial y de maestro. Afortunadamente, la gente que acude a nosotros suele apreciar nuestro trabajo.”